En esta entrada queremos compartir con ustedes el artículo publicado por nuestro director, Marcelo Aravena, en el diario El Mostrador. En el texto, se presenta un análisis didáctico sobre el coleccionismo y la inversión en arte en Chile.
Acá el texto:
A continuación, les presentamos una serie de elementos fundamentales a considerar al invertir en arte en Chile. A través de las siguientes variables, se explicara porqué y cómo se puede invertir en arte de forma informada y segura.
1) El arte contemporáneo (desde 1945) sube en promedio aproximadamente entre un 11% a un 13% anual. (según diferentes estudios de la agencia de mercados Artprice, revistas especializadas y del economista Sebastíán Edwards ). En diez años las obras por lo general duplican sus valor. Al contrario del arte moderno (1945 hacia atrás) que se ha depreciado drásticamente en la últimas décadas en Chile. Al contrario de otros activos, las obras de arte contemporáneas no han perdido valor en los últimos 40 años, por el contrario se han revalorizado. Además se trata de un activo muy estable en épocas de alta inflación y de volatilidad en las bolsas mundiales.
2) Para realizar una buena inversión en una obra, el autor/artista debe tener una trayectoria internacional; su obra debe haber sido adquirida por museos y o colecciones importantes, debe haber participado en subastas internacionales y tener una basta catalogación en libros. Sumado a un currículum destacado en premios y docencia.
3) Los artistas Consolidados en Chile y reconocidos internacionalmente, a nuestro juicio son:
a) Roberto Matta
b) Claudio Bravo
c) Alfredo Jaar
d) Nemesio Antúnez.
e) José Balmes
f) Gracia Barrios
g) Iván Navarro
h) Matilde Pérez.
i) Rodolfo Opazo
J) Roser Bru
j) Guillermo Núñez
k) Ricardo Yrarrázaval.
Cabe señalar que tanto Matta como Bravo (y también Mario Carreño nacionalizado chileno) están en otra división, dado que sus obras se subastan de forma continua internacionalmente, muchas de ellas en varios millones de dólares y son unos de los artistas más importantes del concierto latinoamericano. Los demás artistas tienen obras en importantes museos de Europa y USA, sus obras se han subastado en altos precios en connotadas casas de subastas. Estos artistas son, en su mayoría, Premios Nacionales de arte o poseen importantes premios. Sus obras han sido ampliamente catalogadas, muchos de ellos tienen una reconocida historia docente y existe una amplia crítica e investigación sobre sus trabajos.
4) Artistas consolidados en Chile en vías de un reconocimiento internacional. A nuestro juicio son :
a) Samy Benmayor
b) Bororo.
c) Mario Toral
d) Arturo Duclós
e) Gonzalo Cienfuegos
d) Paz Errázuriz.
e) Ricardo Maffei.
d) Bernardo Oyarzún.
e) Raúl Zurita.
d) Palolo Valdez.
f) Guillermo Lorca
g) Voluspa Jarpa.
h) Fernando Prats.
I) Gonzalo Diaz.
j) Eugenio Dittborn.
k) Monica Bengoa.
* Hay artistas que si bien han fallecido, su obra ha tenido un importante rescate a nivel nacional son: Gustavo Poblete, Carlos Ortuzar, Gonzalo Vial, Carlos Leppe. Ramón Vergara Grez, Sergio Larraín entre otros.
* Por otro lado cabe destacar a artistas chilenos que viviendo en el extranjero han alcanzado una importante notoriedad como el caso de Victor Castillo, Manuela Viera Gallo, Denis Lira, Ciro Beltrán y el street painting Dasic Fernandez.
5) Artistas en vías de su consolidación en Chile.
a) Matías Pinto
b) Rodrigo Cabezas.
c) Bruna Truffa.
d) Víctor Hugo Bravo.
e) Norton Maza.
f) Claudio Correa
g) Nicolas Franco.
h) Nury Gonzalez.
i) Gonzalo Ilabaca.
k) Jorge Lankin.
* Un importante aporte también lo han generado colectivos de artistas, destancandose figuras como Jorge Gonzalez Lohse, Claudia Kemper, y Carlos Araya.
6) Artistas emergentes.
a) Lucas Esteves
b) Celia Avendaño
c) Nicolás Brum
d) Antonia Cruz
7) El precio de las obras de los artistas consolidados en Chile con reconocimiento internacional varía según el año de estas. Por lo general, son mayormente valorizadas las del período después del denominado inicial, es decir su segundo período, establecido por la crítica como el “descubrimiento”. En otras palabras, es cuando el artista hace un aporte o consigue una singularidad distintiva. Generalmente se traduce en la expresión de una década.
Este fenómeno se ve en obras de Matta de los años 40, Antúnez de los 50, Balmes de los 60, Jaar de los 80, sólo por citar algunos ejemplos.
8) El precio de una obra entonces está dado por los siguientes aspectos:
Autor/ Año de la obra/ Técnica/ Formato/ Estado de conservación/ Exposiciones/ Certificaciones/ Procedencia/Catálogos/ Libros o literatura.
9) En cuanto a la Técnica, tienen mayor valor los trabajos de pintura sobre tela (ya sea óleo, acrílico, esmalte, etc.) que los dibujos en papel o en cartón (esta es una convención internacional histórica producto del deterioro que pueden sufrir las obras en papel). Aunque hoy en día la enmarcación libre de ácidos puede evitar el envejecimiento del papel, se sigue con esa convención al establecer precios en las casas de subastas.
10) En el caso de los grabados, los de mayor valor monetario son las aguafuertes, seguido por las litografías, xilografías, etc. Termina, en ultimo lugar, la serigrafía y las impresiones digitales.
11) La fotografía ha tenido un aumento sostenido de su valor en estos últimos años, pero no ha podido superar en Chile el problema de establecer y controlar su reproducción en serie.
12) Aun no existe en Chile un mercado de venta de instalaciones. Estas, si bien se han logrado vender, representan un hecho aislado y casual. No es aun una constante como en otros países latinoamericanos como Argentina, México o Brasil.
13) Al margen de Roberto Matta y Claudio Bravo, quienes poseen precios que superan el millón de dólares, Chile tiene a sus artistas consolidados con reconocimiento internacional como los más baratos del continente.
Los 10 artistas más importantes de cada país en el concierto latinoamericano sobrepasan los $300.000 mil dólares con sus obras importantes en las subastas internacionales. Mientras, en Chile aun es posible encontrar obras de sus artistas más destacados en menos de 20 mil dólares. Lo cual significa tanto una anomalía como una oportunidad de inversión. Esta anomalía tiene múltiples causas que se analizarán más detalladamente en el punto (20).
14) Las falsificaciones, si bien existen, tienen un lugar acotado en el mercado, producto de la seriedad del mismo, sobretodo de las galerías más importantes y porque las falsificaciones son burdas y se detectan fácilmente. Una obra que tiene catálogo de exposición siempre necesitará de una certificación y una procedencia, pero en menos medida de aquellas obras que no la tengan. La prueba más fehaciente de la autenticidad de una obra está en la certificación del mismo autor o de la familia. La certificación de la galería tendrá directamente relación con la seriedad y profesionalismo de la misma.
15) Conocer la procedencia es indispensable. Siempre, antes de adquirir una obra, se debe preguntar quién fue su propietario anterior. En cuanto al estado de conservación es importante que la obra esté en buen estado, sino es así, hay que preguntar informadamente a distintos restauradores para saber si es posible o no recuperar la obra lo más parecido posible al estado original. Las obras en mal estado carecen de valor, pero las que están en un estado de deterioro mediano se pueden recuperar y así volver a obtener el valor original.
16) No necesariamente es más barato comprar una obra al mismo autor que a una galería. Ya que la galería maneja los precios del mercado y no necesariamente el autor, que puede pedir un precio más alto o más bajo que el real valor de mercado. Es un activo muy importante para un artista contar con una galería seria y profesional como representante, estas son las encargadas de la comercialización, de defender los precios en el mercado, de llevar al artista a ferias de arte, de incorporarlo en bienales y exposiciones de museos. Además que son las únicas habilitadas para incluir obras en subastas internacionales. Las galerías hacen la producción y la comercialización dejando al artista con el tiempo necesario para que este se pueda dedicar a la creación, la investigación o a la docencia.
17) En Chile, el valor real de una obra en el mercado está dado por la demanda. Esta no es una frase de obviedad económica, se debe pensar que existen obras del período moderno,de importantes artistas, que no tienen demanda alguna. Los paisajes y las marinas hoy en Chile casi no valen nada, o mejor dicho, valen lo que alguien dé por ellas.
18) El mercado del arte a nivel internacional se divide en:
Mercado Primario: Son las Ferias de Arte conjuntamente con las Galerías de arte.
Mercado Secundario: Son las Subastas.
Mercado Terciario: Son los Corredores de arte o Artdealer y las ventas entre privados.
En Chile no existe mercado secundario y si existe, no es una constante. Por lo tanto, no se puede obtener una estadística exacta de cual es la oferta y la demanda de cada artista. Además, el mercado de subastas de arte en Chile se confunde con el de antigüedades y escasamente se rematan obras contemporáneas. No existe información como en otros países del valor real de mercado de la mayoría de los artistas.
19) El valor de mercado en Chile lo determinan la competencia entre galerías serias y profesionales que han perdurado en el tiempo, que no son más de 10 a 15 galerías. Un 95% de estas están ubicadas en Santiago. El valor de mercado se establece entonces gracias a la búsqueda y comparación que hacen los mismos clientes, los cuales buscan el precio más conveniente que ofrecen las galerías. Así, estas adecúan sus precios a la demanda.
20) Volviendo al tema de que en Chile los artistas del circuito mayor, o sea los consolidados con reconocimiento internacional son los más baratos del continente. Esto se debe, en primer lugar, a una tardía reacción por parte de las élites chilenas en invertir en arte contemporáneo. Hasta finales de los años 80¨y principios de los noventa, las élites compraban arte moderno (llámese paisaje, marinas, naturalezas muertas). Esto produjo un desfase de unos 30 años de por ejemplo, Argentina, Perú o Uruguay donde las élites compraban arte contemporáneo ya desde la década del 1950 al 1960 . Este fenómeno de compra de arte contemporáneo que comienza a principio del siglo XX en USA y Europa, llega a Chile después de 1990, cuando las élites, en un lento proceso, han entendido que la inversión rentable está en arte contemporáneo y no ya en el moderno o clásico.
21) La función teórica y crítica es fundamental porque catapulta o va en detrimento de ciertas obras. Por ejemplo, en Chile el alza que ha obtenido el en el último tiempo el grupo CADA, que ejecutó su obra a principios de los 80, ha sido sorprendente; En cambio, la baja o el decrecimiento en los precios de los cuadros de Carmen Aldunate son producto de la crítica, que ha señalado que su continua repetición iconográfica va en desmedro de su expresión artística. La crítica y los textos teóricos han ayudado a enfrentar la moda, y la superficialidad, para darnos luces sobre la real importancia de las obras. Existe una estrecha relación de algunas galerías con agentes teóricos, lo cual posibilita un circulo virtuoso. A esto se suma una actividad periodística muy dinámica; un punto a favor de la industria artística en Chile, pues esta actividad alimenta de contenido al mercado artístico. Un importante agregado es la actividad de los museos que con exposiciones continuas de buen nivel curatorial revitalizan la escena artística, como lo son el MAVI y por sobretodo el MAC con una gestión sorprendente a pesar de su escaso financiamiento.
22) Dicho esto, prevemos que la obra de los artistas del circuito mayor, o sea, de consolidados con reconocimiento internacional está destinada a subir drásticamente en los próximos años. Esto se debe a que, en primer lugar, ya existe coleccionismo en ellos; es decir, hay coleccionistas que han invertido importantes sumas en su obra. A esto se agrega el interés de museos, producto de la investigación de teóricos y críticos sobre el cuerpo de sus obras. Además de que su obra posee amplio reconocimiento masivo. La personas los reconocen como artistas con trayectoria. A su vez, algunos artistas están ya instalados en el mapa de curadores y galeristas a nivel mundial, sólo falta la colocación de buenas piezas en el mercado internacional de subastas, para que estos artistas no sólo doblen si no que puedan llegar a cuadruplicar el valor de sus obras, al igual que sus contemporáneos de Argentina, Perú, Colombia , Brasil, Uruguay y México, donde las obras importantes de sus 10 principales artistas sobrepasa los 300 mil dólares. Nosotros creemos que, hoy por hoy, con los precios actuales, no hay mejor inversión que comprar obras de un artista chileno consolidado con reconocimiento internacional.
Marcelo Aravena
Galerista de Arte por 15 años.
Experto en Arte Latinoamericano.